Estellencs, entre el mar y la montaña

Una parte tranquila y apartada de la isla llamada Estellencs está a poca distancia en coche de la artística ciudad de Deià. Con sólo 350 habitantes, escondido en la Tramuntana, encontrarás casas tradicionales mallorquinas de piedra y grandes fincas que han pasado de generación en generación. Con pintorescas vistas sobre la costa oeste y hacia el mar, este mágico lugar atrae a aquellos que abrazan la naturaleza en su totalidad, disfrutan de magníficas puestas de sol y son felices con un poco de aislamiento relajante.  Las casas aquí se distribuyen en su mayoría de forma individual

Picture credits: www.visitestellencs.com

Estellencs tiene un rápido acceso al Puerto de Canonge, situado en la rocosa costa oeste entre Banyalbufar y Esporles. Descubierta al gran público y disfrutada a partir de 1944, se trata de una bonita cala familiar en la que podrás acomodarte en las rocas para disfrutar del sol de la tarde y remar en sus aguas cristalinas y poco profundas. Asegúrate de llevar tus gafas y tubo de buceo, ya que la vida submarina de este lugar es de otro mundo.

Photo credits: Klaus Störmann / Community from outdooractive.com

Hay muchas rutas que puedes tomar para llegar a este puerto pesquero si quieres caminar de antemano, hermosas pasarelas marcan la costa que se extienden tan lejos como puedas imaginar, llegando a Soller si caminas lo suficiente. En Port Canonge encontrarás el restaurante Can Madó, de cocina típica mallorquina, si te apetece comer de tapas con alimentos frescos de la isla. Si no es así, un tentempié casero es también perfecto para sentarte en las rocas mientras sumerges y dejas que tus pies se mezan en el agua.

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La zona de Estellencs es un lugar mágico, cuando estás aquí puedes imaginar que está casi igual que en 1944 cuando se acondicionó por primera vez. Natural e idílico.